BERENICE

“Berenice” is a photographic series that tries to be a poetic song to beauty, to nature and to the reason why we must be guided towards ecological sustainability and recycling or reutilization, instead of generating constant residues and materials that are not suitable and destroy the Environment.

Lucilla Bellini Web.

«Berenice« es una serie fotográfica que trata de ser una canción poética para la belleza, la naturaleza y la razón por la cual debemos guiarnos hacia la sostenibilidad ecológica y reciclaje o reutilización, en lugar de generar residuos constantes y materiales que no son adecuados y destruyen el medio ambiente.

Vivía sola, como vivió casi siempre, en su cárcel dorada, preciosísimamente perfecta, en su horrenda soledad, esperando… siempre esperando, enamorada de su dios, necesitada de su calor, pero siempre sola, aunque divinamente hermosa, como se espera de quien está a la vista de todos por ser la que es: Berenice, la reina.

Una vez conoció la dicha de ser correspondida en la ilusión. Nunca había experimentado tanta emoción junta: el viaje, el palacio, el templo, el ritual, los adornos, las familias, los invitados, el pelo, el vestido,… En un momento había dejado de ser esa niña, esa joya que sus padres conservaron como una delicada flor hecha del aire de Grecia, para transformarse en sólo una noche, temida y ansiada al mismo tiempo, y ser en un instante  mujer, esposa, amante, dueña de su dios y reina de todo un pueblo, Egipto.

Por eso siempre recordaba ese día y lo disfrutaba envuelta en la brisa del tiempo como si éste se hubiera detenido en el momento más feliz de su vida, donde lo tuvo todo, y todo al mismo tiempo. Ella se aventuraba dentro de su más sagrado templo, la Naturaleza extensa y serena, luminosa y amable, donde volvía a sus más gratos recuerdos, y se entregaba. Se daba a sí misma como siempre lo había hecho, como la enseñaron, como sólo ella sabía hacer: con todo su amor y todo su ser, sin aderezos ni parafernalias reales.

Hoy la niña Berenice no está. Se fue sola como vino tras su héroe venerado, inmortalmente feliz. Envuelta en el halo de viento del inquebrantable amante que es el tiempo detenido. Dejando como testigo la ofrenda de su  amor en las estrellas del templo en el firmamento nocturno.

Lucilla Bellini

La idea de la sesión de fotos nació pensando en la sensibilización sobre el plástico,
su uso masivo y la contaminación para producirlo y desmantelarlo.

Gabriel Arriola Bravo decide hacer un vestido a mano, reciclando el material de embalaje.
La idea nació en colaboración con Carlos Montesdeoca , peluquero y maquillador,
para crear un estilo real y arcaico para combinar con el vestido hecho.

La protagonista de la sesión fotográfica es una bailarina clásica de la compañía del Auditorio de Santa Cruz de Tenerife,
Sary AsTigarraga González , quien usa el vestido en un lugar emblemático de
la isla por su belleza natural y que crea un contraste con el material del vestido en sí.

El proyecto propone una visión poética y al mismo tiempo femenina y elegante
sobre el uso masivo del plástico en la sociedad contemporánea, su impacto catastrófico en el medio ambiente.
También aborda el problema de que el plástico que termina en el océano no se destruye,
pero con el tiempo destruye el ecosistema marino.

La serie fotográfica narra poéticamente un himno a la belleza, la
naturaleza y la razón que debe guiarnos hacia la eco-sostenibilidad y la reutilización, en
lugar de la basura y la producción de materiales que no son adecuados para el medio ambiente.
Mientras el protagonista baila, hierático y solemne como la mitológica reina egipcia Berenice,
las palabras de Edgar Allan Poe resuenan poéticamente en la historia de 1835
dedicada a esta fascinante figura mitológica:

«Mi razón podría muy bien parecerse a ese acantilado del mar …
ese acantilado cuya torre permaneció inmóvil contra toda violencia humana y el terror más terrible del agua y los vientos».

Lucilla Bellini

The idea of ​​the photoshoot comes thinking of awareness over the plastic,

its massive use and pollution to produce it and to dismantle it.

Gabriel Arriola Bravo decides to create a suit by hand, recycling packaging materials.

The idea was realized in collaboration with Carlos Montesdeoca, hairdresser and makeup artist,

that creates a regal and archaic style to match the dress and the concept.

The protagonist is a ballet dancer of the company Auditorio in Santa Cruz de Tenerife, Sary Astigarraga Gonzalez,

wearing the dress in an emblematic location of the island for

its natural beauty and creates contrast with the material of the suit .

The project proposes a poetic vision and at the same time, feminine and elegant;

over the massed use of plastics in contemporary society and its catastrophic impact on the environment.

It faces the problem that plastic that ends up in the ocean is not destroyed, but,

with the passage of time, it destroys the marine ecosystem.

The photographic series tells a poetic hymn to beauty,

to nature and to the reason that must guide us towards eco-sustainability and reuse,

rather than the waste and the production of materials that are not suitable for the environment.

While the main character dance, hieratic and solemn as the mythological Egyptian queen Berenice,

poetically sound the words of Edgar Allan Poe in the story of 1835 dedicated to this fascinating mythological figure:

“My reason could very well resemble each other in that cliff close to the sea …

what resisted as a tower building to every human violence and to the most terrible fear of water and wind.”